Por Marian Díaz, jueves, 30 de marzo de 2023 – 11:40 p.m.

Transcurridos más de seis meses desde que se radicó un proyecto de ley para establecer un proceso único y centralizado para la credencialización de proveedores de salud, todavía la medida no se ha aprobado en la Legislatura. Así lo denunció ayer el comisionado de la Oficina del Comisionado de Seguros (OCS), Alexander Adams, quien urgió a los legisladores a tomar acción, para entre otras cosas, detener la fuga de médicos recién graduados.

La legislación (P de la C 1459), presentada por el gobernador Pedro Pierluisi el 1 de septiembre de 2022, fue aprobada por la Cámara de Representantes el pasado 7 de marzo. La misma pasó al Senado y se refirió, seis días después, a la comisión de Salud que preside el senador Rubén Soto.

Soto solicitó memoriales a siete entidades para que se expresaran sobre el proyecto. Estas son: la Administración de Seguros de Salud (ASES), el Departamento de Salud, Asociación de Farmacias de Comunidad, Coopharma, Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico, Asociación de Compañías de Seguros (Acodese) y la OCS.

ero solo las últimas dos -Acodese y la OCS- entregaron los memoriales, según la oficina del senador. Las entidades tenían 10 días laborables, es decir, hasta el pasado 27 de marzo para expresarse en torno a la medida.

Aunque se trata de un proyecto de administración, tanto ASES como el Departamento de Salud no cumplieron con el requerimiento legislativo. No obstante, algunas de estas entidades ya se habían expresado o enviaron memoriales a la comisión de Salud de la Cámara de Representantes.

Ese es el caso de Coopharma. Esta cooperativa de farmacias no favorece el P de C 1459, ya que las farmacias tienen un proceso de credencialización funcional y que cumple con criterios federales y estatales.

El problema con las credenciales afecta mayormente a los médicos, sobre todo a los recién graduados, y otros profesionales de servicio directo al paciente como dentistas, psicólogos y optómetras, ya que cada aseguradora tiene su propio sistema para evaluar si deja entrar al nuevo médico a su red de proveedores o autorizar uno existente.

Adams señaló que entre las principales frustraciones de los médicos y profesionales de la salud figuran las trabas para obtener un contrato con un asegurador u organización de servicios de salud. Si no obtienen la credencial y el contrato, no pueden facturar por los servicios prestados, ya sea a planes gubernamentales o privados.

Este proceso de credencialización no solo es complejo y costoso, según el comisionado, sino que además es extenso y carente de uniformidad. Esto “provoca dilaciones de meses mientras los proveedores permanecen sin poder dar servicio a los asegurados” y, por ende, sin generar ingresos.

El formulario de solicitud uniforme y sistema digital centralizado (“clearinghouse”) que propone la medida permitirá recopilar en un solo lugar los documentos de los proveedores y estos profesionales solo tendrían que enviar su información una sola vez. De esta forma, habría una manera más rápida y eficiente de obtener la credencialización.

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